En “Cuentos Cortos de una Chica Cuerda”, Frida Palomares Villalobos, escritora y poetiza de 36 años con transtorno de bipolaridad maniaco-depresiva desde los 16, nos introduce al mundo de “La alegría que llega a la euforia y de la depresión que la conduce a la tristeza más profunda, a través de la intensa vida de sus personajes, así Dante, Justina, Artemisa, Sabina, entre otros, nos muestran el lado más intenso del , la adicción, la prostitución, la depresión y el amor. Estos cuentos hacen gala de la metáfora y la prosa para describirnos los pasajes más turbulentos de sus personajes sin dejar de lado la parte autobiográfica de la autora.
A través de pasajes de luz y oscuridad nos lleva de la mano emocional de la razón arrebatada y burlona, entre la dulce melancolía cruzamos el filo de lo inimaginable de la cordura y entre lágrimas y risas cruzamos a su mundo imaginario. Dulce desesperanza acompasa cada movimiento y con figuras sutiles crea un espectro de amor engarzado a su corazón. Entristecida nos muestra su lado imaginario y destrozado donde las emociones enfatizadas sienten y sufren por este.
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